Al ritmo de los tambores y las cornetas van caminado, sin decir nada… están de luto…“Dios ha muerto”.
Avanzan a paso lento, unos con el rostro cubierto, otros con sus pies descalzos y muchos de ellos arrastran cadenas que pareciera que éstas lloran al raspar la cantera de las calles del Centro Histórico de SLP, en su recorrido desde que sale de El Templo del Carmen.
Caminan hombres fuertes en su fe y en sus hombros cargan el peso de imágenes religiosas y aunque éstas lleguen a pesar entre una y dos toneladas, a decir de los fieles, el peso de las reliquias no se compara con la “cruz” que a diario cargan.
Así es la Procesión del Silencio, un evento que sin importar la religión es impresionante y que en este 2023 cumplió 70 años.
Son las 8 de la noche y como cada año, en Viernes Santo, las puertas del templo del Carmen están cerradas y de pronto abren para dar paso a una de las procesiones más importantes del mundo.
“Es increíble, vengo desde Monterrey a ver esta maravilla, vale mucho la pena”, platica Claudia, visitante.
La Procesión del Silencio de San Luis Potosí es uno de los eventos religioso más importantes para los fieles católicos. “Es una tradición que nos hace reflexionar, es una muestra del respeto por la muerte de Jesús”, comenta María de la Luz, visitante.
Poco a poco más de 2 mil fieles pasan en pequeños grupos, conocidos como cofradías.
Ante la mirada de más de 90 mil personas entre creyentes y turistas.
La procesión del silencio está conformada por más de 20 cofradías con 15 imágenes religiosas.
A nivel mundial, la procesión del silencio de San Luis Potosí ocupa el segundo lugar, como el evento más representativo y grande, después del peregrinar que se realiza en Sevilla, España.
Este 2023 la Procesión del Silencio cumplió su 70 aniversario. Su primera edición fue organizada por el gremio de los toreros y hoy, a cargo de Cultura con altas y bajas, pero con la majestuosidad que se caracteriza.